Conti di San Bonifacio Wine Resort

Esto es algo que Italia hace a las mil maravillas: un lugar oculto entre olivares, viñedos y unas vistas interminables de la campiña que nos hacen pensar en el paraíso terrenal.
Un lugar verdaderamente aristocrático donde alojarse – y en este caso literalmente ya que los dueños de San Bonifacio son en la vida real un conde y una condesa.
Como se suele decir, la clase es permanente y así lo demuestra esta inmaculada casa rural. Cuesta creer que esto fue hasta hace poco un edificio abandonado y en ruinas. Gracias a que el conde gastó tiempo, esfuerzo y dinero hasta transformarlo en lo que es ahora: una combinación de hotel estilo boutique en un entorno rústico y sofisticado.
No hay muchas habitaciones – siete en total – pero suficiente espacio para que sintamos que todo el hotel está a nuestra disposición. Están diseñadas por artesanos locales al estilo toscano y todas ellas incluyen aire acondicionado, suelo radiante, Samsung de pantalla plana, TV por cable, reproductor DVD/CD, bar con frigorífico, secador de pelo, wifi, edredones, enormes toallas y unos albornoces de lujo.
En el exterior tenemos terrazas en las que podemos cenar, piscina y un bar al aire libre. La propiedad abarca 125 hectáreas de viñedos, olivares y bosque. Hay cursos de cocina y de yoga. Podemos montar a caballo o deambular por numerosos senderos de los alrededores. También visitar aldeas medievales de la zona o preciosas playas de la costa.
Un auténtico edén.