Patio de la Luz

Cuando viajamos a otro país, solemos imaginar que nos recibirán anfitriones locales, gente que conoce su tierra como nadie. En el Hotel Patio de la Luz no es exactamente así, pero lo que sí es seguro es que con Sylvia y Niël no te llevarás ninguna decepción. Esta pareja de origen holandés está profundamente enamorada de la tierra en la que decidió empezar este gran proyecto y gran ilusión, y esa misma ilusión es la que te transmitirán desde el momento en el que pongas un pie allí.

Estamos en Vejer de la Frontera, pueblo anclado en una colina con vistas al estrecho de Gibraltar, rodeado de huertos y naranjales. Con una fuerte influencia árabe en su arquitectura, este pueblo de casas todas encaladas de blanco queda a solamente quince minutos de preciosas playas de arena blanca. No es de extrañar que Sylvia y Niël se enamorasen perdidamente de este bonito pueblo, dejando en 2020 sus raíces y empezando aquí su gran aventura.

 La casa de pueblo fue reconstruida de una manera inteligente y con muy buen gusto, mezclando materiales como la piedra, la madera y el cemento en perfecta simbiosis. Un patio lleno de luz, plantas y esculturas de Niël, donde podrás tomarte un café o una copa de vino en plena tranquilidad. Hay una pequeña piscina para refrescarse en verano y, en invierno, una sauna finlandesa. Las seis habitaciones que comprende son de buen tamaño y muy confortables, con camas king size, y cada una tiene un nombre de las varias luces que iluminan nuestras vidas: amanecer, sol, luna…

 El ambiente es artístico, ideal si te apetece deleitarte o forjar nuevas amistades. Vejer es un pueblo empinado, con calles adoquinadas, que hacen que para conocerlo se necesiten buenas piernas. En verano se llena de conciertos en varios bares y restaurantes. Vejer continúa transmitiendo ese aire tan andaluz, por lo que aquí te será imposible aburrirte.