Silves Villa

Casa Silves es una villa muy especial y lujosa, situada pintorescamente a orillas del río Arade, muy cerca de Silves. Esta casa rural tiene un espacioso jardín, con  jacuzzi y una maravillosa piscina rodeada por una terraza de madera con vistas sobre el río. Construida en 2011, esta propiedad se encuentra en una zona rural muy bonita.

La villa está rodeada de varias terrazas en diferentes niveles, conectadas por escaleras. La zona de entrada cuenta con una rampa para permitir el acceso en silla de ruedas. Una encantadora terraza con cómodos sofás, tumbonas y una amplia mesa de comedor te invita a relajarte. También hay una cocina al aire libre con instalaciones para hacer barbacoa. En un nivel inferior se encuentra la piscina de 8x4 metros con una terraza de madera y numerosas tumbonas. La vista del río y las colinas circundantes es maravillosa.

El interior la sala de estar se caracteriza por grandes ventanales y puertas dobles que dan a la terraza cubierta. Aquí encontrarás cómodos sofás, una estufa de leña y un televisor de pantalla plana. Una mesa de comedor cuadrada con capacidad para ocho personas. La cocina de madera abierta está completamente equipada con una nevera empotrada de acero inoxidable, una espaciosa placa de cocina de cinco fuegos, un microondas y una cafetera Nespresso.

Cada una de las cuatro habitaciones de la casa tiene su propio baño y aire acondicionado. Tres de las habitaciones están ubicadas en la planta baja, una de las cuales es accesible para personas con movilidad reducida y tiene un baño con ducha a ras de suelo. Dos huéspedes adicionales pueden ser alojados en el altillo, previa solicitud y por un costo adicional. El dormitorio principal en el piso superior es particularmente lujoso y tiene un baño precioso y desde aquí se accede a una encantadora terraza en la azotea con buenas vistas.

La villa está equipada con conexión a internet inalámbrica y dispone de lavadora y secadora. La villa se limpia dos veces por semana, se cambia la ropa de cama semanalmente y las toallas se cambian dos veces por semana.

Silves, la ciudad más cercana, está a solo tres kilómetros de distancia y ofrece a los visitantes la oportunidad de explorar las ruinas de un impresionante castillo, pasear por el pintoresco mercado y visitar las numerosas tiendas, restaurantes y bares. Las playas más hermosas están a no más de quince kilómetros de la villa y son fácilmente accesibles.