Dos casitas en el la campina de Azeitão con mucho encanto. Un alojamiento privilegiado desde donde explorar la bella península de
Setúbal. Lisboa es una ciudad afortunada de poder disponer de tantos
sitios magníficos no lejos del centro – y uno de ellos es el Parque
Nacional de Arrábida. Situado a 40 kms al sur de la capital, Arrábida
presume de un paisaje espectacular con picachos de granito de 500 metros
erigiéndose sobre el mar, una exuberante vegetación mediterránea,
playas de blanca arena y caletas a las que podemos llegar en barco. Y
aquí encontramos la Quinta da Arrábida, en tierras que antaño fueron
propiedad del duque de Palmela y que son ahora zona protegida. La Quinta
es el resultado de la reconversión de dos casas de campo – la Casa do
Forno y la más pequeña Casa do Pinheiro – discretamente separadas en el
mismo y cuidado jardín. El estilo es enteramente portugués, habiendo
sido restauradas respetando sus orígenes, como vemos por las alfombras
tradicionales, suelos de baldosa, cabezales de hierro forjado y paredes
encaladas. Los jardines son de ensueño y la piscina aparece enmarcada
por las montañas que la circundan. Hay magníficos restaurantes a pocos
minutos en coche, así como las mejores playas de la región.