São Miguel pertenece al grupo oriental de las  Azores y es la isla más grande del archipiélago. Probablemente la maravilla natural más famosa de São Miguel sea la Lagoa das Sete Cidades: en un inmenso cráter volcánico yacen los lagos gemelos, desde el mirador Visto do Rei uno brilla en azul, el otro en verde.

Como otra característica única en las Azores, la isla ofrece géiseres y aguas termales calientes que se pueden disfrutar para un baño.

La isla cuenta con pequeñas playas de arena, cuevas, impresionantes acantilados y fortificaciones. De hecho, São Miguel no es inferior a su reputación, sino que cautiva a los viajeros con lagos y paisajes de gran belleza, vastas llanuras salpicadas de flores, y al mismo tiempo puedes experimentar el bullicio de una gran ciudad allí. Con el aeropuerto de Ponta Delgada, la isla es el punto de partida perfecto para explorar otras islas.

En São Miguel encontrarás museos, imponentes iglesias y palacios llenos de arte y tesoros históricos. Pero tampoco debes perderte los deportes: el golf, el senderismo, el ciclismo y la equitación son todas opciones posibles en esta hermosa isla. A través de los senderos del Parque Natural de Ribeira dos Caldeirões o al escalar el Pico da Vara, el pico más alto de la isla, podrás experimentar toda la belleza de São Miguel.

Además de Pico 1, São Miguel es un gran lugar para la observación de ballenas, ya que aquí se reúnen muchas especies diferentes de ballenas y delfines. Puedes obtener más información sobre esto en nuestra Guía de las Azores 2.

El jardín botánico en Ponta Delgada es uno de los más hermosos de las Azores. Aquí verás una variedad de plantas y árboles exóticos, incluyendo algunas especies endémicas.

Así que rápidamente puedes darte cuenta de que São Miguel fascina tanto a los amantes de la naturaleza como a los aficionados a la cultura y la acción.

Ha habido asentamientos en São Miguel desde 1444, después de que Enrique el Navegante introdujera la cría de ganado en la isla. Los primeros habitantes vinieron de las provincias portuguesas de Estremadura, Alto Alentejo y el Algarve. Más tarde, llegaron colonos de Madeira, judíos, musulmanes y posiblemente franceses. La exportación de naranjas a Inglaterra trajo gran prosperidad a São Miguel a finales del siglo XVIII. Las plantaciones de naranjas fueron destruidas por el mildiu que apareció en 1860, pero el cultivo de nuevos productos como tabaco, té, lino, achicoria, remolacha y piña lograron evitar un colapso económico. Poco a poco, se agregaron otras industrias, así como la expansión de la pesca y la cría de ganado. Hoy en día, São Miguel es uno de los centros políticos y administrativos de la región con un auge económico.

Pasando tus vacaciones en São Miguel, tendrás la oportunidad de probar la piña más deliciosa que puedas imaginar. São Miguel es la única isla que cultiva piñas en Europa. Son extremadamente populares debido a su sabor dulce y tamaño especial.

Además de las plantaciones de piña, la isla cuenta con el sitio de producción de té más antiguo de Europa: la plantación Gorreana. Tomarte un respiro y disfrutar de té local debería estar en tu lista de deseos para las Azores.

Las Azores son famosas por su queso y vino. Además, hay un plato especial que existe en su forma tradicional verdadera solo en São Miguel: el Cozido das Furnas. Un guiso que se prepara en las aguas termales.