Galicia: Camino de Santiago, costa y buena comida
Galicia es tan célebre por sus maravillosos paisajes, verdes en sus campos y plateados en el mar, como por sus bellísimas edificaciones que van desde las pintorescas viviendas tradicionales hasta las más importantes joyas monumentales. Su territorio se sitúa en el límite noroccidental de la Península – e incluso el “límite” de lo que fue el mundo conocido hasta el descubrimiento de América, el Cabo de Finisterre. El litoral gallego se caracteriza por altos acantilados y profundos entrantes del mar en tierra – o rías.
Se suelen diferenciar dos sectores: las Rías Altas – Cedeira, Ortiguiera, O Barqueiro, Viveiro, Foz y Ribadeo, entre otras – y las Rías Baixas o Bajas – Muros y Noia, Arousa, Vigo y Pontevedra; entre las dos zonas se suelen citar las Rías de "A Costa da Morte” –Corcubión, Camariñas y Corme y Laxe – y las Rías del Golfo Ártabro – Ferrol, Ares y Betanzos y A Coruña.
Galicia posee, además de un excelente paisaje, importantes ciudades y pueblos con un conjunto histórico-artístico inmejorable, y puertos pesqueros de gran importancia. El clima en el norte es templado y lluvioso, mientras que en el sur se registran temperaturas más altas que en la zona norte, y dos meses de sequía estival: Julio y Agosto.
Orgullosa de su herencia y cultura Celta, así como de su lengua propia – el Galego, más similar al portugués que al español – Galicia es, de muchas y variadas formas, una región singular y única.