Málaga, sol y playa
Málaga es mar y montaña, sol y cielo azul, pescado y marisco, arte e historia. El destino perfecto para cualquier tipo de escapada. Cuenta con 160 kilómetros de litoral y catorce pueblos costeros. El resto se encuentran rodeados de la naturaleza más pura con un total de quince espacios protegidos como reserva, paraje o monumento natural. Bosques y ríos de excepcional belleza donde aún hoy es posible encontrar zorros, águilas reales o cabras montesas.
Esta región es conocida por ser la cuna de Pablo Picasso, cuyo museo es visita de rigor, pero también son famosas sus playas, sus parajes naturales y sus pueblos costeros como Fuengirola o Marbella.
Málaga es una provincia alegre y acogedora, llena de folclore andaluz. Sus fiestas están cargadas de color y arte y, cada año, atraen a miles de turistas. Entre las más conocidas encontramos la Semana Santa, el Corpus Cristi. Ambas constituyen un verdadero espectáculo donde las calles se engalanan con colores, ramas y flores. El Desfile de Enganches y la Feria del Caballo, en verano, son otros de los grandes atractivos festivos de la región.
Málaga es marinera en su litoral, donde nunca es invierno; y, tierra adentro, la naturaleza se muestra en todo su esplendor. Pequeños pueblecitos blancos de bella arquitectura, envueltos en mágicas leyendas, poblando recónditos y tranquilos valles. Y, mientras, la alta sierra abarca con su mirada todo el horizonte hasta perderse en el azul del mar.