Córdoba, el corazón de la historia andaluza

Córdoba, atravesada por el rio Guadalquivir, es una tierra fértil de pueblos blancos, olivos, perfume de azahar y una herencia árabe y hebrea que emana por todos sus rincones. 

La capital fue la urbe más importante de la España romana y, más tarde, el corazón del imperio islámico occidental con el califato. Está repleta de monumentos, entre los que destaca la Mezquita-Catedral en el centro de la ciudad, con sus mil columnas y efectos de luz y de color.

Las festividades religiosas son uno de los grandes atractivos de Andalucía en general y, especialmente, de Córdoba. Durante la Semana Santa, la provincia se llena de misticismo y belleza, con sus procesiones y pasos de la Virgen y Santos, acompañados por miles de penitentes (los encapuchados nazarenos) dando lugar a una atmósfera realmente peculiar.

Del 5 al 12 de mayo tiene lugar el Festival de los Patios Cordobeses, una fiesta de gran atractivo y colorido, organizada en las callejuelas y plazas del centro. Durante la misma se celebra un concurso en que se premian los patios más destacados por su belleza. A finales de mayo tiene lugar la Feria de Córdoba, en la que se disfruta del baile y el cante flamenco en alegres casetas adornadas con farolillos y luces de colores; una fiesta inolvidable con una impresionante iluminación nocturna.

Córdoba es también sinónimo de historia. Esta provincia ha quedado marcada por el hombre desde el Paleolítico. Tartésicos, oretanos, romanos y árabes son sólo algunos de los pueblos que han habitado esta región, dejando tras de sí una impronta que aún hoy puede ser admirada.

Los paisajes naturales cordobeses también son dignos de mención. Campos de olivos y viñedos bañados por el Guadalquivir y sus afluentes, las montañas de Sierra Morena y las Serranías Subbéticas del sur son sólo algunos de los ejemplos de joyas naturales que posee esta provincia.

Córdoba - hoteles con encanto y apartamentos

Ven a Córdoba, transpórtate a un escenario histórico, lleno de magia y encanto. Maravíllate ante sus monumentos y relájate en su rico entorno natural. Tanto si buscas una escapada cultural como si quieres pasar unos días desconectando en la montaña, en SecretPlaces ponemos a tu disposición la mejor selección de hoteles con encanto y apartamentos de lujo que harán que tus vacaciones sean inolvidables.

Dónde ir en Córdoba

La provincia de Córdoba es una de las joyas de Andalucía. El Guadalquivir la atraviesa su provincia de este a oeste bañando una fértil vega llena de cultivos de cereales, vid y olivos. 

La capital de la provincia,  la misma que fue en su día capital del califato islámico español, conserva aún vestigios históricos de excepcional importancia, como la Mezquita (consagrada como Catedral cristiana), la vieja Judería con su Sinagoga y el Alcázar con sus bellos jardines. 

Además de sus maravillosos conjuntos arquitectónicos, Córdoba tiene una amplia oferta de museos: el Museo Arqueológico, situado en lo que antes fue un palacio renacentista, es una muestra de la riqueza histórica de Córdoba con sus restos prehistóricos; el Museo de Bellas Artes, reúne una imponente colección de pinturas y esculturas de Zurbarán, Murillo y Goya; y el Museo de Julio Romero de Torres, el conocido pintor local que reflejó en sus obras la singular belleza femenina cordobesa.

El resto de la provincia también está repleta de lugares de interés, especialmente para los amantes de la naturaleza. Los parques de Sierra de Cardeña en Los Pedroches y Montoro, la Sierra de Hornachuelos y las Sierras Subbéticas brindan la posibilidad de practicar deportes al aire libre. Además, no puedes dejar de visitar los pueblos más famosos y con más encanto de la provincia, entre los que destacan Zuheros, Hornachuelos, Almodóvar del Río y Priego.

Gastronomía cordobesa

La gastronomía cordobesa actual es la muestra viva de la larga tradición e historia que posee la región. Las diferentes civilizaciones que pasaron por este territorio fueron dejando su huella en la gastronomía. De los árabes viene la proliferación de los frutos secos y las mezclas de sabores agridulces. Los cristianos aportaron a los platos, la carne y algunas de las tradiciones culinarias más importantes de la cocina mediterránea.

Los platos típicos más famosos de la cocina cordobesa son el salmorejo, elaborado con tomate, pan y aceite de oliva; los boquerones en vinagre; el rabo de toro, servido con patatas fritas de acompañamiento; y el flamenquín de jamón serrano, unos filetes de lomo de cerdo y jamón serrano empanados.

En cuanto a los postres, destacan los dulces tradicionales como los Alfajores, los Pestiños y el famoso pastel cordobés, elaborado con hojaldre relleno de cabello de ángel y espolvoreado con azúcar y canela.