Weeke Barton

¿Weeke Barton? Monthe Barton más bien, ya que cualquiera que busque una escapada verdaderamente relajante para desconectar del estrés de la vida moderna querrá, sin duda, quedarse más que unos pocos días. De hecho, eso es lo que hicieron Jo y Sam. Esta urbanita pareja londinense, una ex directora de restaurante y la otra diseñadora, se alejó del ajetreado Hackney para abrir esta maravillosa escapada en el encantador Devon.

Su sensibilidad creativa y de buen gusto está a la vista de todos, ya que han combinado la historia y la arquitectura de una casa de 500 años de antigüedad, que alberga cinco habitaciones magníficamente decoradas, con una sofisticación de estilo moderno que no está fuera de lugar en la ciudad de la que proceden. Así, muros antiguos, techos con vigas, acogedoras chimeneas y grietas se dan la mano con interiores y piezas ultramodernos para ofrecer lo mejor de ambos mundos.

Todo ello en el más tranquilo y mágico de los entornos que reponen el alma. De ahí nuestra afirmación original de que una "weeke" (perdón por el juego de palabras) puede no ser suficiente. Sobre todo si se tienen en cuenta los extras que ofrece, ya sea el maravilloso desayuno comunitario y la cocina casera, la relajada hospitalidad o las posibilidades de actividades al aire libre. Al fin y al cabo, es la base perfecta para explorar los páramos, las onduladas colinas de Devon e incluso ir a la playa, ya que la Riviera inglesa está a sólo unos 30 km.

Al ser un lugar aislado, los que busquen señales de wifi y conexiones telefónicas potentes se sentirán decepcionados. Pero el objetivo de cualquier estancia aquí es recargar las pilas y relajarse al ritmo de la naturaleza. Weeke Barton es el lugar perfecto para dejar atrás los aparatos modernos.